Al caer enferma de cáncer, la autora, que había visto fallecer a su padre y hermana aquejados de la misma enfermedad, se enfrentó a ella empleando la máxima fuerza mental y física posible.
Fruto de esa experiencia surge este libro en el que relata aspectos que tal vez nadie se atreve a contar y para los que hay que estar preparados. Se preocupa además por infundir ánimo, fuerza y una buena dosis de humor, si es posible, con la intención de relativizar el ego, que queda muy maltrecho por la enfermedad.