En Zombillenium, todo se va al traste.
El parque de monstruos, después de haber sufrido la ira del pueblo en el segundo tomo, se encuentra con una crisis interna. Aurélien, uno de los empleados más recientes convertido en demonio, no acepta su nueva condición de inmortal y preferiría pedirse una baja por depresión (¡!). Pero si solo fuese eso? La llegada de Jaggar, un vampiro enviado directamente por el Big Boss Behemoth, acaba de desatar la cizaña en esta peculiar empresa del más allá.
Está claro que el pequeño mundo de Zombillenium está pasando por una crisis. Un tomo tres rico en replanteamientos, tanto con sus personajes principales como con los segundarios. Avanzamos en la trama y queremos saber aún más. El universo Zombillenium da aún para mucho. Tanto de hecho que su autor Arthur de Pins está en proceso de dirigir y animar el largo que se está realizando a partir del universo Zombillenium.