De pequeño sólo quería ser más rápido que los demás en la moto. Soñaba con ganar un Campeonato del Mundo de Velocidad. Pero ha conseguido mucho más de lo que podía llegar a imaginar: ha revolucionado las clasificaciones, ha establecido nuevos récords, ha traspasado los límites, ha rediseñado los confines del deporte y ha creado nuevas modas. Se ha convertido en el rey del motociclismo de competición y ha dominado como el mejor soberano su reino, ganando sin parar. En 2002, con sólo veintitrés años logró algo que nadie más ha conseguido: ganar todos los títulos mundiales posibles, en las categorías de 125, 250, 500 y MotoGP. Ha conquistado victorias a nivel internacional con Aprilia, Honda y Yamaha. Corre y vive fuera de cualquier esquema, y propuso al mundo una nueva imagen del piloto de motos de carreras. Ha atraído a los circuitos a centenares de miles de aficionados y tiene pegados al televisor a millones de personas de todo el mundo. En mayo de 2005 le concedieron el título Laurea Honoris Causa en la Facultad de Ciencias de la Comunicación de la Universidad de Urbino, gracias a sus grandes dotes de comunicador.