¿Qué es la felicidad? ¿Cómo conservarla? Éstas son preguntas que la humanidad se ha hecho durante milenios, y a las que los grandes pensadores (o cualquiera de nosotros) han contestado de formas diversas, a veces opuestas. Séneca creía que el camino de la felicidad estaba marcado por la razón, una facultad que nos permite vivir en armonía con la naturaleza, imponiéndonos al vaivén del azar y a los requerimientos del deseo. La Mettrie escribió su propia propuesta: sus estudios médicos en el siglo XVIII le llevaron a concluir que la felicidad dependía de los sentidos, identificando así la virtud con el placer, y renegando de toda autoridad divina o moral que pudiera dictar sobre el camino de la vida feliz de un ser humano. Este libro es un verdadero combate filosófico por la felicidad.