Este libro aborda un período corto, pero crucial, en la historia reciente de España: los veintiún meses entre la derrota de la insurrección izquierdista de octubre del 34 y el alzamiento derechista de julio de 1936. Debe recordarse que el PSOE y la Esquerra de Cataluña plantearon textualmente como guerra civil su insurrección de octubre de 1934 contra la II República. Su derrota no indujo a las izquierdas a cambiar de actitud, revolucionaria en los partidos mayores y radicalmente intolerante hacia la derecha en los demás. La derecha, a su vez, salvó a la república en aquella ocasión para caer rápidamente en divisiones y maniobras suicidas. Esta combinación de tendencias convierte esos meses en un período con carácter propio, del más alto interés político e histórico. A lo largo de él se fueron esfumando, como en una tragedia griega, las posibilidades de convivencia pacífica y en libertad, hasta llegar al choque sangriento entre dos concepciones de la sociedad en general y de España en particular, a una contienda cuya magnitud y trascendencia nadie podría haber previsto