Elías, de once años, es el primer niño nacido libre en Buxton, un asentamiento canadiense de esclavos negros huidos de Estados Unidos. Como explica el autor en la nota final, se trata de un hecho histórico, ya que la población fue fundada por un ministro presbiteriano blanco en el siglo XIX. El pueblo llegó a ser tan próspero y alcanzó tal renombre que hasta niños blancos y nativos canadienses asistían a su escuela.