Tisanas, jarabes, preparaciones caseras o fórmulas farmacéuticas en forma de pastillas, extractos o aceites esenciales son parte de nuestra vida cotidiana.
Pero ¿no resulta más satisfactorio que las plantas medicinales crezcan en casa? Para conseguirlo, no es necesario tener un jardín. Si están claras las necesidades y se escogen las plantas correctas, se pueden cultivar en el balcón, la terraza, el alféizar de una ventana e incluso, en algunos casos, en el interior de la vivienda.
Para crear un balcón muy saludable, basta con seguir los consejos de este libro y escoger entre las 45 plantas que se describen. Todas van acompañadas de una serie de consejos sobre cómo plantarlas, cuidarlas, recoger sus frutos y conservarlos. Además, se ofrecen «recetas» de infusiones u otro tipo de preparados. Un índice de las patologías que pueden aliviar estas plantas le ayudará a seleccionar con acierto.
No hay excusas, solo hay que preparar las macetas, la tierra, las tazas y la miel para saborear unas buenas infusiones.
¡El balcón está cargado de salud!