El capitán Wilson Cole fue víctima de un linchamiento mediático y se convirtió en el chivo expiatorio de los políticos. Lo sometieron a un consejo de guerra y fue rescatado por la leal tripulación de su nave, la Teddy R. que tuvo que abandonar la República. Ahora, con la Teddy R. transformada en una nave mercenaria que vende sus servicios al mejor postor, la tripulación trabaja evacuando hospitales, liberando a clientes de una prisión alienígena, o haciendo que un cártel criminal deje de extorsionar a un planeta aterrorizado.