Natalia, muy afectada por la muerte de su hermana, es enviada al campo a pasar el verano en compañía de sus primos. Allí vivirá envuelta en flores secas, vestidos antiguos, conjuros mágicos, sueños y pesadillas. En su mundo imaginario y frágil, que resurge cada noche con la oscuridad y en el que nada es como parece ser, se pone de manifiesto la insalvable distancia que separa a Natalia de sus primos, especialmente de la encantadora Irlanda.Una novela en la que la belleza, la crueldad y los presentimientos recrean una atmósfera inquietante e irresistible y con la que Espido Freire debutó como escritora en 1998. La maldad se esconde en todas partes. Incluso enla propia familia.