Nunca pretendió ser un héroe, todo lo contrario. El capitán Sheridan Drake desprecia esa fama gratuita porque, aunque pueda engañar a los demás, no se mentiría nunca a sí mismo. Una vez fue un caballero. Ahora es un ángel caído. Un cínico. Un canalla y un truhán, y nadie aparte de su persona merece su lealtad. Por eso le exaspera y le desarma Olympia de Oriens, con su inocencia y su fe en él y en unos ideales que Sheridan enterró hace tiempo. Si cree que va a acompañarla en su arriesgada aventura, está muy equivocada. «Este libro es una pequeña joya, casi impecable. Ninguna lectora del género romántico histórico debería perdérselo.» Rendezvous