«El autor no sólo tiene un don para crear tramas trepidantes y recrear el colorido local de ese crisol de culturas que es Trieste; su comisario Proteo Laurenti es un entrañable cabezota que no deja inmiscuirse en sus investigaciones ni a dignatarios orgullosos ni a funcionarios prepotentes.»
Der Spiegel
La noche en que el comisario Laurenti regresa a Trieste tras asistir a una conferencia internacional sobre la seguridad en la Comunidad Europea, en su mismo tren se comete el asesinato del taxidermista Marzio Manfredi. Las pistas indican que éste se ganaba la vida con el contrabando de drogas y animales de especies protegidas. para la investigación, Laurenti no puede contar con su nueva compañera, Pina, porque acaba de ser atacada por un pitbull. Casualmente, es atendida en la villa de un tiburón de las finanzas un tanto sospechoso, al otro lado de la frontera italo-eslovena. Pina no imagina que se encuentra en pleno corazón del crimen financiero. Goran Newman, su anfitrión, gana miles de millones en los mercados internacionales gracias a sus negocios inmobiliarios y al comercio de cereales sometidos a manipulación genética. Un intento de atentar contra el millonario por parte de un grupo de radicales de la ultraderecha croata procura aún mayor estrés al comisario...