Se acerca la partida final. Por una parte, Lloth, la temida reina de la Red de Pozos Demoníacos. Por otra, Eilistraee, la Señora de la Danza. Entre una y otra, hasta el último elfo oscuro de Faerun. Todas las piezas están en juego, ya se ha establecido una estrategia y lo único que falta es que los servidores de los dioses oscuros sellen sus alianzas finales, pronuncien sus plegarias y ayuden a escoger un futuro para los drow. Si es que realmente tienen un futuro…