Brevedad, rapidez, agudeza, gracia; he aquí los caracteres esenciales de esta forma de poesía que, para ser tildada de buena, ha de reunir en una de las tres cualidades de corto, leve y chispeante. Pocos versos, rima perfecta, leve motivo, aguda intención, gracia en la forma e ingenio en el fondo: esto es el epigrama.