Un fin de semana de verano, en una casa en el campo, tres amigos se reúnen en el primer aniversario de la muerte de Tony: su hermano, John, su cuñada, Marian, y su antiguo compañero, Lyle.
El apacible reencuentro se ve perturbado por la presencia de un extraño, el joven pintor que ahora sale con Lyle. Lo quieran o no, los rituales del verano -un baño en el río, una cena al fresco con invitados o un paseo nocturno- estarán marcados por la figura del amigo ausente y cada uno de los tres deberá buscar su manera de encajar la pérdida.
Peter Cameron combina como pocos autores la sátira social con la intimidad y la ternura, y obliga al lector a reflexionar sobre la propia experiencia, la dificultad de conocer verdaderamente a alguien o lo ambiguo de las relaciones sociales. Publicada originalmente en 1994, Un fin de semana sigue siendo, sin duda, una de las mejores novelas de su autor.