Lea, Avishag y Yael son amigas de la escuela en un pequeño pueblo al norte de Israel. Durante las clases sueñan despiertas con los chicos que les gustan. Cuando cumplen los dieciocho años, son reclutadas por el Ejército y su vida cambia de forma inesperada.
Yael se acuesta con un chico al que entrena como tirador. Avishag hace guardias y observa a los refugiados que se abalanzan sobre la alambrada. Lea, destinada en un puesto de control, imagina las historias que se ocultan tras los rostros familiares que pasan ante ella día tras día. Las tres viven al filo de la muerte, en la intensidad de ese instante eterno antes de que el peligro estalle.