Dru Rayne y su tío huyeron a Los Ángeles tras el desastre causado por el huracán Katrina. Sin embargo, tras cinco años en la ciudad, se enfrentan a un nuevo peligro. Cuando Joe Pike es testigo de cómo le dan una paliza al tío de Dru, les ofrece su ayuda, pero ninguno de ellos la acepta y tampoco le dan ninguna explicación de por qué hay unos misteriosos agentes del FBI siguiéndoles los pasos.
A medida que los niveles de violencia se hacen mayores, y el propio Pike se convierte en un objetivo, Elvis Cole y él averiguarán que Dru y su tío no son quienes parecen y que todo lo que creía saber de ella no es más que una mentira.
Una venganza, una amenaza que procede de su pasado les ha dado caza y solo Pike y Cole pueden protegerles.