La mayoría de las dietas para perder peso se basan en el control del cuerpo, pero nuestro cuerpo no necesita ser controlado, solo que tengamos confianza en él: por sí mismo es perfectamente capaz de saber cómo debemos comer. El secreto consiste en dejar de escuchar los mensajes de nuestra mente sobre lo que está bien y lo que está mal, y pararnos a escuchar las sensaciones de nuestro cuerpo. A lo largo de estas páginas podemos encontrar una forma inteligente de comer, para que nuestro cuerpo vuelva a su estado natural, el que estábamos destinados a tener, antes de dejarnos llevar por la mente. A través de la eliminación de la tensión y la ansiedad, podemos comunicarnos con nuestro cuerpo y perder peso mientras disfrutamos comiendo todo lo que nos gusta, suprimiendo los alimentos prohibidos, y el estrés que supone estar en un permanente estado de insatisfacción.