El I Ching es el más antiguo y profundo de los textos clásicos chinos y ha sido venerado durante más de 3.000 años como oráculo y compendio de sabiduría. Esta considerado como el "antepasado" de toda la filosofía, y es la fuente primordial del misticismo del Tao Te King, de la estrategia de el arte de la guerra y del humanismo de Confucio, que anotó sus comentarios al texto.
En esta versión, bellamente ilustrada, Thomas Cleary se ha ceñido al original chino, respetando el sentido enigmático del I Ching, lo que permite al lector una mayor libertad de interpretación de acuerdo con su propia intuición y circunstancias.
Precisamente, este significado críptico y velado el que enriquece las lecturas y hace que esta una referencia inexcusable tanto para el que se acerca al I Ching por primera vez como para el que ya conoce otras versiones.