Una victoria en la repesca es la última oportunidad para permanecer en el Liar Game. Para Nao y Akiyama, que han acumulado una deuda astronómica, es un juego que deben ganar a toda costa si quieren salvar a los compañeros con los que jugaron en la tercera partida.
Tras el empate de Fukunaga en la ronda de vanguardias, Akiyama se enfrenta en la ronda de centrales al enigmático Kikuchi. En el "póquer de 17 cartas", una variante un tanto peculiar del juego, Kikuchi ha descubierto un método infalible para ganar que pone a Akiyama contra las cuerdas. Sin embargo, el "hombre que hace posible lo imposible" no se amilana y comienza a dar la vuelta a la situación de una manera grandiosa.