A partir de su historia personal y su papel relevante como activista, Víctor Gutiérrez pone sobre la mesa las dificultades a las que el colectivo LGTBI se enfrenta en el deporte, y la importancia de visibilizar la diversidad sexual. A pesar de que cada vez hay más deportistas que se atreven a dar el paso y visibilizar su orientación, la homofobia y discriminación siguen presentes en gradas y vestuarios, y se siguen reproduciendo los mismos comportamientos que hace 40 años.
Un libro que denuncia con contundencia esta realidad todavía presente en nuestra sociedad, especialmente en deportes mayoritarios. Un libro que nos hará replantearnos prejuicios y estereotipos entorno a la masculinidad, y que nos habla sobre los roles de género, y sobre el deporte tal y como nos lo habían contado.