Una temporada inolvidable para el Real Madrid. Al trigésimo quinto título liguero se le sumó la guinda del pastel, la Decimocuarta Liga de Campeones, conquistada contra todo pronóstico y en la que se presenciaron algunas de las más épicas remontadas del club ante algunos de los equipos más ricos y poderosos del planeta.
Primero fue el PSG de Messi, Neymar y Mbappé, luego el vigente campeón de la competición, el Chelsea inglés, posteriormente le tocó el turno al Manchester City, favorito para los especialistas, y, como cierre, el Liverpool, en una fantástica noche en París.
Un año que quedará en el recuerdo de millones de aficionados y que será casi imposible de igualar por ningún otro club.