Siglo XXVII. La Eternidad domina el mundo. Formada por las mentes más brillantes de cada época, se trata de una organización que envía a sus integrantes a viajar en el tiempo. Su objetivo es alterar la historia de la humanidad para protegerla de cualquier catástrofe. En este contexto, un grupo de privilegiados ha adquirido la condición de ser eterno. Uno de ellos es Andrew Harlan, uno de los técnicos más eficaces y excelentes del proyecto, que a su vez es la mano derecha de Twissell, el jefe de la Eternidad. Twissell se encarga de calcular los cambios que hay que hacer y de sus posibles consecuencias. Pero todos sus planes peligran cuando, en una misión al futuro, Harlan se enamora perdidamente de Noys Lambent, una secretaria no eterna. ¿Será capaz de destruir la Eternidad solo por quedarse con ella?