El mejor cronista de nuestro país recorre en bicicleta los Pirineos de costa a costa y nos lo cuenta en una crónica plagada de humor, inteligencia e historias humanas.
Montañas medio mágicas y hombres medio osos, un pueblo de pescadores chiflados y un Tour sin un solo cuerdo, una aldea cubista y un viento surrealista, osos eslovenos y peregrinos coreanos, una guerra que empezó por una señal de Stop y otra que acabó por tres vacas, monstruos tímidos y camareros gruñones, un país enano entre montañas gigantes, emperadores enamorados y condesas pelirrojas, héroes de mentira y esclavos de verdad. (Y un zorro.)