Eros y Tánatos nos remiten al principio y al final de la vida, a los dos extremos entre los que transcurre la existencia humana; al menos así es como nos la hemos representado en términos culturales, amparados tanto por el conocimiento humanístico como por el científico.
Dando continuidad al ensayo ¿Qué nos hace humanos?, Salvador Macip retoma el «biohumanismo racionalista» como método para analizar el impacto de esos dos momentos determinantes de nuestra existencia. Se propone comprender sus mecanismos y, así, poder llegar a controlarlos y modificarlos para construir sociedades mejores.
En este ensayo el autor habla de sexo, de género, de incertidumbre. Y también de la familia, la monogamia, el patriarcado, la inmigración y del amor y el odio, entre muchos otros temas que durante los últimos tiempos han ganado un protagonismo notable en el momento de definirnos y organizar nuestra vida individual y en grupo. Entender los procesos biológicos y evolutivos de nuestra especie nos permitirá romper los patrones que nos constriñen desde el nacimiento hasta la muerte.