Espía, amante y reina. Una apasionante novela histórica sobre la mayor historia de amor.
Inés de Castro tembló en su presencia. Alfonso IV de Portugal era el hombre que había matado a su querido tío, medio hermano del rey, el señor de Alburquerque, quien la había criado. Y también fue Alfonso el monarca que la expulsó sin piedad de la corte para mantenerla en Castilla, alejada del infante Pedro, acusándola de ser una espía peligrosa, tan peligrosa como Leonor de Guzmán y sus bastardos, o como María de Padilla, que controlaba al nieto del rey. Alfonso era el hombre que nació bajo la estrella de Algol, como le había advertido su amada Zulema. Algol, la estrella demoniaca.
Cuando Inés escuchó el galope de los caballos y vio el estandarte real, cayó de rodillas y suplicó mirando los siete anillos de Alfonso IV. Pero su destino estaba ya decidido. Una vez más Pedro le había fallado: cobarde, frágil, no estaba allí para defenderla, para gritar que era su esposa, casada ante Dios, madre de sus hijos legítimos.
Entre Portugal y Castilla, entre intrigas, traiciones y matrimonios reales, Isabel Stilwell dibuja, al son del laúd, su retrato de Inés de Castro, una espía ágil que movía las piezas del tablero del poder, una amante apasionada que hechizó con sus ojos verdes y que al fin se convirtió en reina de Portugal. La mayor historia de amor real. La historia de Inés de Castro como nunca antes la habían contado.