José es llamado «el hombre del silencio» pues no se cita ni una palabra suya en todos los Evangelios canónicos. También se lo llama patrono por designación papal y su papel es el de «Nuestro Padre y Señor ». Maestro de Jesús en su trabajo, maestro de oración para nosotros. Y, sin embargo, conocemos poco y queremos conocer más de su andar, de su hablar, de su decidir, de su vivir, de su morir. La historia ayuda algo a conocer su ambiente y el porqué de muchas decisiones audaces o sencillas. No han faltado en la Iglesia revelaciones privadas que sin añadir nada a la revelación divina aportan luces y riqueza. No es este un evangelio apócrifo, pero sacia la sed de conocer a este gran hombre que, tras María, ocupa el lugar más alto en la historia de la salvación.